
La agencia DSCA estadounidense ha hecho pública la posible venta a Australia de un sistema de escucha submarina Surveillance Towed Array Sensor System Expeditionary (SURTASS-E), así como de diversos equipos y servicios relacionados por un coste estimado de 207 millones. Por el momento se desconoce a qué buque o buques estaría dirigido el sistema, haciéndose referencia únicamente a su instalación en buques de oportunidad o Vessels of Opportunity (VOO).
El sistema de escucha submarina Surveillance Towed Array Sensor System Expeditionary (SURTASS-E) es un sistema remolcado de detección que utiliza tecnología de sonar pasiva. El propósito principal de este sistema es detectar y monitorizar la actividad bajo la superficie, incluidos submarinos y otras amenazas submarinas. El desarrollo de este sistema comenzó en 1973, alcanzando la capacidad inicial operativa en noviembre de 1984. El sónar remolcado original consistía en una matriz lineal pasiva de unos 1600 m. Es capaz de operar a velocidades entre 3 y 10 nudos, a unas profundidades de 150 hasta 460 m.
Entre finales de los 80 y principios de los 90, la US Navy comenzó a trabajar en el desarrollo de un sistema activo de baja frecuencia que complementara el sónar pasivo (Programa Artemis). En 2004 se llevaron a cabo las pruebas de mar a bordo del USNS «Impeccable», y entre 2004 y 2006 se produjo su entrada en servicio. Años más tarde, en 2016, entró en servicio una versión más pequeña denominada Compact Low Frequency Array (CLFA).
Actualmente, Estados Unidos se encuentra definiendo las capacidades de un futuro sustituto bajo el programa T-AGOS (X) o T-AGOS-25. Esta nueva serie de siete buques (sustituye a 5) mantendrá el diseño SWATH, pero incrementará considerablemente su tamaño llegando a las 8.500 toneladas de desplazamiento.
Respecto al SURTASS Expedicionario o SURTASS-E, fue diseñado entre 2017 y 2019 mejorando algunas de las características del sistema, que consta de tres componentes básicos:
- Sonar remolcado: es un conjunto lineal de hidrófonos, que son dispositivos sensibles al sonido, remolcados detrás de una embarcación. Estos hidrófonos capturan las señales acústicas en el entorno submarino y transmiten la información a bordo del barco.
- Sistema de procesamiento de señales y análisis de datos: las señales acústicas capturadas por el array de sensores son procesadas y analizadas a bordo de la embarcación utilizando sistemas informáticos especializados. Estos sistemas pueden identificar y clasificar diferentes tipos de ruido submarino, incluidos los sonidos específicos generados por submarinos y otros objetos submarinos.
- Integración de la información: la información procesada se integra con otros datos de inteligencia y vigilancia, proporcionando una visión más completa de la situación submarina en una región determinada.
El sistema SURTASS-E se puede implementar en diferentes plataformas, como buques de superficie, submarinos o vehículos submarinos no tripulados. Su capacidad de operar en un modo pasivo, sin emitir señales activas de sonar, hace que el sistema sea difícil de detectar y permite a las fuerzas navales llevar a cabo misiones de vigilancia y reconocimiento de manera discreta.
El SURTASS-E es especialmente útil en entornos marítimos donde la detección de submarinos es un desafío, como ocurre en aquellas áreas con una alta densidad de tráfico marítimo o en regiones con condiciones oceanográficas complejas. Al proporcionar una mayor conciencia situacional en el ámbito submarino, este sistema mejora la capacidad de las fuerzas navales para proteger sus intereses y mantener la seguridad marítima.
Curiosamente, en este caso no parece que sea para instalarse ni en ninguno de los buques en servicio o en construcción con la Royal Australian Navy, ni en un diseño específico, como los buques de escucha submarina, de los que hemos hablado largo y tendido en estas páginas. Por el contrario, el anuncio de la DSCA estadounidense hace referencia a la instalación en buques de oportunidad (Vessels of Opportunity o VOO), un término que se utiliza en algunas marinas para referirse a embarcaciones que no forman parte de la flota oficial, pero que pueden ser movilizadas y utilizadas en casos específicos.
Dicho esto, los VOO pueden ser embarcaciones comerciales, de recreo, de investigación o de cualquier otra índole que no pertenecen a la Armada, pero que pueden ser utilizadas de manera temporal en situaciones de emergencia o para llevar a cabo misiones específicas. Estas embarcaciones pueden ser propiedad de empresas privadas, organizaciones gubernamentales o incluso individuos particulares.
Be the first to comment