La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) ha anunciado la puesta en marcha de la nueva Célula de Coordinación de Infraestructura Submarina Crítica, instaurada como reacción al sabotaje al Nord Stream el pasado mes de septiembre. La nueva institución se encargará de velar por la seguridad de todas aquellas infraestructuras vitales para los Estados Miembros, incluyendo ductos, cables de comunicaciones o servidores de datos, proponiendo medidas que permitan mejorar la disuasión frente a posibles estados hostiles.
Tras la Cumbre de los Ministros de Defensa de la OTAN en Bruselas los días 14 y 15 de febrero, el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, ha anunciado la puesta en marcha la nueva Célula de Coordinación de Infraestructura Submarina Crítica. Es una de las decisiones que han tomado los líderes de la organización para fortalecer aún más la disuasión y la defensa de la Alianza, incluida la relativa a la aprobación de nuevas directrices para la planificación de la defensa de la OTAN. Según Stoltenberg:
Esto refleja la realidad de que vivimos en un mundo más peligroso. Con el comportamiento agresivo de Rusia, la amenaza persistente del terrorismo y los desafíos planteados por China, impulsará los cambios de capacidad en los años venideros. Y garantizará que nuestra disuasión y defensa siguen siendo fuertes y creíbles.
Una medida que nace como respuesta al sabotaje del gasoducto Nord Stream en el Mar Báltico en septiembre de 2022. Sabotaje que quedó confirmado por la investigación llevada a cabo por las autoridades suecas, en la que se apuntaba a la utilización de explosivos, cuyos restos se encontraron en el lecho marino, a pesar de que su autoría todavía no haya podido establecerse.
El de las infraestructuras submarinas es un tipo de amenaza que afecta particularmente a Estados miembros como España, dependientes del suministro de gas procedente de Argelia, así como también por el paso de numerosos cables submarinos cerca de sus costas, tanto en la vertiente atlántica, como en la mediterránea en el caso de nuestro país.
La nueva Célula de Coordinación de Infraestructura Submarina Crítica que operará desde el Cuartel General de la OTAN en Bruselas permitirá incrementar el grado de disuasión ejercito por la Alianza frente a posibles ataques. Tal y como como indica el teniente general alemán Hans-Werner Wiermann que asumirá su liderazgo, se trata de un tema «vital para nuestra seguridad».
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